Misión del Blog

Proclamar el señorío de Jesucristo sobre todos los aspectos de la cultura

sábado, 5 de diciembre de 2009

Los “crímenes” del cristianismo

Alguien me escribió recientemente criticando mi artículo titulado “El amor según Ateodom”, acusando a los cristianos de haber cometido barbaridades a través de la historia. Decidí postear parte de la respuesta, porque este es un argumento que se esgrime a menudo contra el cristianismo:

En cuanto al último comentario cometes dos errores graves: el primero es equiparar cristianismo con catolicismo; el segundo es evaluar el cristianismo por algunos hechos de personas que profesaban serlo. Nota que en mi artículo no cito las barbaridades de Stalin y otros, sino que me limito a evaluar filosóficamente algunas incongruencias aparecidas en una entrevista al presidente de Ateodom.

Permíteme compartir contigo esta historia verdadera, relatada por Marie Chapian en su libro "De quienes el mundo no era digno”. Ella narra ampliamente los sufrimientos de los cristianos en Yugoslavia, donde la jerarquía eclesiástica politizada hizo mucho mal al testimonio del evangelio. Es realmente vergonzoso lo que algunos oficiales eclesiásticos corruptos hicieron “en nombre de Cristo”, lo que trajo como consecuencia no poco descrédito a los verdaderos creyentes.

En cierta ocasión un evangelista llamado Jakov llegó a una villa donde comenzó a compartir el evangelio con un anciano del lugar, pero éste le interrumpió abruptamente diciéndole que no quería saber nada del cristianismo; y a seguidas comenzó a contarle una historia tras otra de la iglesia de su pueblo, historias plagadas de saqueos, abusos y explotación. “Mi propio sobrino fue muerto por ellos – dijo el anciano. Vestían todas sus elaboradas vestiduras, capas y cruces como si fueran una comisión celestial, pero no puedo ignorar sus designios malvados ni sus vidas”.

Con la intención de que este anciano cambiara de parecer con respecto a la verdadera fe cristiana, Jakov hizo la siguiente analogía: “Suponga que yo hubiera robado su chaqueta, me la pusiera y robara un banco. Imagine además que la policía me viera corriendo a la distancia, pero no pudiera prenderme. Un indicio los pone a ellos en su camino, reconocen su ropa. ¿Qué les diría si vinieran a su casa y lo acusaran a usted de haber robado el banco?” Seguramente negaría la acusación. “Ah, pero reconocimos su chaqueta, dirían ellos”.

La analogía molestó al anciano, que de inmediato ordenó a Jakov que abandonara su casa. Pero éste continuó visitando la villa y mostrándole amor al anciano hasta que su obstinación fue vencida. Un día finalmente le preguntó: “¿Qué hay que hacer para ser cristiano?” Pregunta que Jakov aprovechó para guiarlo al arrepentimiento y la fe en Jesucristo. Luego, con lágrimas en los ojos, abrazó al evangelista y le dijo: “Gracias por haber venido a mi vida” – y señalando al cielo añadió: “Usted viste la chaqueta de El muy bien”.

Lamentablemente muchos cometen el error que cometió este anciano al principio: Evaluar la fe cristiana primariamente a la luz del testimonio de algunos que profesan serlo, cuando deberían comenzar por examinar más bien la Persona, la obra y las enseñanzas de nuestro Señor Jesucristo. Eso sería “juzgar con justo juicio”.

© Por Sugel Michelén. Todo pensamiento cautivo. Usted puede reproducir y distribuir este material, siempre que sea sin fines de lucro, sin alterar su contenido y reconociendo su autor y procedencia.

7 comentarios:

Unknown dijo...

Estimado Sr. Pastor:

Gracias por haber sacado tiempo para publicar y contestar mis humildes aseveraciones.

Estoy de acuerdo con usted que no se debe generalizar sobre la responsabilidad de actos de barbarie, y que en su gran mayoría fueron cometidos por la Iglesia Católica. En eso admito que no fui justo.

Pero me remito a la biografía de este personaje (http://es.wikipedia.org/wiki/Miguel_Servet) para refrescarle la memoria sobre uno de los hechos graves perpetrados por el teólogo francés Juan Calvino, considerado uno de los padres de la Reforma Protestante. Y no fue un hecho que no fuera debatido primeramente por las iglesias reformadas de los cantones de Zurich, Schaffhausen, Berna y Basilea, tras lo cual el acusado fue condenado y sentenciado a morir en la hoguera el 27 de octubre de 1553, por lo que la responsabilidad de esa ejecución recae no solo en Calvino, sino en la conciencia de toda la comunidad cristiana calvinista de ese entonces, quienes imitaron a los inquisidores católicos.

“Quien esté libre de pecado que lance la primera piedra”

Sugel Michelén dijo...

Antes que nada, aprecio su disposición a corregir errores de juicio; eso no es común hoy día. En cuanto al caso de Miguel Servet fue un triste suceso sin duda. Calvino mismo tuvo dudas de qué hacer en este caso, por lo que pidió la opinión de otros cantones y aún trató de convencer a Servet de su error teológico. Lamentablemente, la decisión final fue la de aplicar la pena capital en su caso.

Sin embargo, hay algunas cosas que debemos tomar en cuenta. En primer lugar, no podemos comparar el número de víctimas de la inquisición católica con los casos en que los protestantes aplicaron la pena capital por herejía durante la era de la Reforma. En segundo lugar, algunos como Balthasar Hubmaier, se opusieron rotundamente a esa práctica, como vemos en su tratado: “Concerniente a los herejes y a aquellos que los queman”, publicado en 1524. En tercer lugar, los reformadores no eran perfectos y cometieron errores, pero no porque fueran cristianos, sino precisamente porque no supieron aplicar adecuadamente en tales casos los principios del cristianismo.

Ni Cristo ni los apóstoles aplicaron la violencia para tratar con los errores doctrinales, como hizo la iglesia católica. Más bien fueron víctimas de la violencia de los enemigos de la fe, como ha ocurrido a lo largo de toda la historia. El principio bíblico es muy claro en cuanto a la forma como debemos tratar con nuestros enemigos:

Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses. Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto (Mateo 5:38-48).

Unknown dijo...

Sencillamente, estimado Pastor Michelén, ese último párrafo tengo que admitir que es uno de los que son dignos de ser considerados como parte de un libro sagrado perfecto, como también hay muchísimos más en el Nuevo Testamento.

Pero contrasta con el otro que publicamos anteriormente en donde enseñan lo que debe hacerse con los que recogen leña en el Día de Reposo, por solo citar uno de tantos ejemplos similares incluidos intrínsecamente en el Antiguo Testamento.

No obstante ambos siguen vigentes dentro de la misma Biblia que es la guía moral para los verdaderos cristianos (y quiero recalcar que precisamente para los evangélicos, no los católicos, quienes aunque tienen también el libro apenas lo recuerdan), lo cual es una indicación clara en este caso, de que no todo lo que brilla es oro.

El problema está en que precisamente por eso, ni la misma Biblia representa para los ateos una evidencia irrefutable de la existencia de un ser supremo perfecto, todopoderoso y sobre todo bondadoso. Y precisamente, para que tengan validez o fundamento las enseñanzas del Nuevo Testamento, obviamente es necesario también que la doctrina del Antiguo Testamento sea por lo menos respetuosa de los Derechos Humanos más elementales.

El quid del asunto mi hermano es que los ateos no somos lo que ustedes creen que somos (el diablo). Somos personas normales y conscientes de lo bueno y lo malo al igual que ustedes, y que no elegimos ser ateos por llevar la contraria ni por capricho, sino por convicción. Además estamos muy bien documentados y realmente lo menos que somos es ser ignorantes.

Para nosotros tanto Dios como el diablo son simplemente invenciones de los religiosos, con el fin de provocar temor y así controlar a los creyentes haciéndoles creer que el primero es la regla y el segundo la antítesis de esta regla. En otras palabras, los convencen de que para ser mecedores de la vida eterna tienen que seguir determinadas normas y mucho menos atreverse a dudar de los dogmas; en caso contrario automáticamente se hacen merecedores de la condenación eterna con el diablo en el infierno.

Que tenga un buen día, y recuerde uno de nuestros versículos favoritos:
“Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” (Juan 8:32)

Sugel Michelén dijo...

Tal como le prometí, pienso responder sus objeciones en el blog, por lo que le ruego tenga paciencia y continúe leyendo las próximas entradas. Ahora, note que en ningún momento he dicho que todos los ateos son unos perversos, aunque puedo deducir de sus palabras que Ud. sí tiene una muy mala opinión de los creyentes (personas que inventan doctrinas para mantener a las personas esclavizadas). Para que el diálogo pueda ser significativo es imperativo que no pongamos en boca del otro lo que no ha sido dicho. Espero continúe visitando el blog.

Abraham Paniagua dijo...

"El quid del asunto mi hermano es que los ateos no somos lo que ustedes creen que somos (el diablo). Somos personas normales y conscientes de lo bueno y lo malo al igual que ustedes, y que no elegimos ser ateos por llevar la contraria ni por capricho, sino por convicción. Además estamos muy bien documentados y realmente lo menos que somos es ser ignorantes."

Lamento ver como personas dicen que ustedes son "el diablo" y creen lo peor de ustedes, ya que te sorprendera, pero yo y el Pastor Sugel no los vemos asi. Por el contrario, hay ateos que viven "bien" moralmente hablando, y es por esto que me impresionan! No viven lo que creen!

Dices "somos conscientes de lo bueno y lo malo". Aja, que es lo bueno y que es lo malo? Todos los comentarios tratan con la "mentira y falsedad" de la Biblia pero ninguno puede definir cosas basicas como el bien, el mal, la moral, etc etc.

"no elegimos ser ateos por llevar la contraria ni por capricho, sino por convicción. Además estamos muy bien documentados y realmente lo menos que somos es ser ignorantes."

Este es un gran error. No digo que sean ignorantes, pero el ateo no es ateo por una conclusion cientifica, logica y bien estudiada. Por el contrario, lo son por deseo. No hay base cientifica ni filosofica para el ateismo. Por el contrario, filosoficamente hablando, es ateismo es contradictorio y va en contra de la realidad.

Una Sola Carne dijo...

Confieso que este es uno de los muy escasos diálogos en el cual, juzgando por la elocuencia en los dos lados del argumento, podemos apreciar que tanto un lado como el otro esta comprometido con su presuposiciones. Estimado Porfirio, le aseguro que no es coincidencia que usted haya tenido la oportunidad de tener su comentario en este blog. Y por su cordura al hacerlo, me atrevo a deducir que sabe a quien se esta refiriendo, le agradezco, este nivel de respeto a un cristiano ejemplar y también le agradezco que haya por lo menos encontrado al Pastor Michelén digno de intercambiar con usted. No se si lo sabe, pero son pocos lo que hoy en día pueden responderle cualquier inquietud con la precisa sabiduría y debido entendimiento bíblico como este siervo. Perdone la siguiente generalización, pero por lo menos en mi caso, he encontrado 5 ateos, que han respetado, por lo menos tratado de entender el tipo de "esclavitud" a la que usted se refiere que nosotros los cristianos hemos sido condicionados. Estos 5 eran 6, de cientos, son cinco porque un día, por la gracia de Dios, escuche el famoso debate de Dr. Stein y el Dr. Banhsen en la Universidad De California, Irving, en el 1985.
Este debate fue lo que empezó a a trabajar en mi caminar. Y hoy en día, vivo mas seguro, ya no me aferro a mis suposiciones, sino a Dios. Le ruego sea honesto y preciso con sus inquietudes, que lo que mas hay son respuestas, lo que necesitamos son preguntas e inquietudes y personas que sepan hacerlas. Con esto no quiero decir que me declaro intelectualmente superior a usted, nunca haría eso, la Biblia misma me declara así. El salmo 14, versículo 1 dice: "El necio ha dicho en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, han cometido hechos abominables; no hay quien haga el bien." Cuando La Biblia habla de necio no esta insultando, esta describiendo la situación de esa persona, esta viendo una condición y llamándola como la ve. Faltaría tiempo y este comentario tomaría otro tono, si usted tomaría este comentario de la manera equivocada. Y creamo no espero que, en su posicion de ateo, le de la debida autoridad a este texto. Pero por favor entienda que no he querido insultarlo, solo decirle que por la imposibilidad de lo contrario, Es Necio el que dice que no hay Dios.
Puedo escuchar un compromiso en su tono, un compromiso con la verdad, pero le aseguro que la verdad no es una cosa, ni una posición. La verdad, no es lo que deja de ser mentira. La mentira es lo que dejar de ser verdad. Como dijo alguien por hay, "la oscuridad no existe, lo que existe es la falta de luz" La necedad no existe, no que existe es la falta de sabiduría. Con lo previo también vuelvo a asegurarle que mi intención no es insultarle, de ninguna manera. Mi intención es, de alguna forma, comunicarle que el día que yo me di cuenta de que era necio, fue el día que empeze a ser sabio. La verdad amigo Porfirio es una persona, una identidad divina. La verdad no empezó a existir cuando llegaron a existir los humanos. Antes de que existiera este planeta, una estrella no podría ser brillante y oscura a la vez, la verdad no puede ser mutualmente exclusiva. "Yo soy la verdad", dijo ese carpintero Judío en un tiempo atrás y lo confirmo cuando resucito y nos mando Su Espiritu, en consolador.
Entiendo que no espero que se de cuenta de su necedad ahora mismo, así no paso conmigo. Aunque tambien creo en los milagros. :) Esto no va a pasar en unos cuantos comentarios de blogs y foros. Pero le aseguro de que el simple hecho de que esta leyendo estas líneas, me dice que el proceso empezó hace mucho tiempo.

Muchas Gracias, a Dios primero, y después a usted por su atención.

Muy Honestamente;
Edwin Dominguez
unasolacarne@gmail.com
The Bronx, NYC

Fares Palacios dijo...

Hola estimado Porfirio,

Dices: "El quid del asunto mi hermano es que los ateos no somos lo que ustedes creen que somos (el diablo)"

Me causa curiosidad, quisiera saber si al mencionar al "Diablo" usted le reconoce como tal, es decír, si al defenderse en base a un infundio, pues nadie le dijo tal cosa, ¿Reconoce la existencia de Satanás? Digo esto porque luego afirma:

Dices: "Somos personas normales y conscientes de lo bueno y lo malo al igual que ustedes"

¿Como llegó usted a un conocimiento de tal realidad entre lo bueno y lo malo? El asunto es que, si no hay Dios Porfirio, no existe un canon para decidír que es y que no es bueno o malo.

Tienes la convicción de ser Ateo, y esa convicción no difiere en mucho de cualquier Religión, entiendo que la consecuencia lógica de voluntariemnte negar a Dios, es una carencia de reglas absolutas, y posteriormente solo quedaría un relativismo fútil. Sin embargo, a pesar de ese relativismo, "Estás convencido" Y es que no entiendo como alguien que no cree en los absolutos, esté tan absolutamente convencido de ello.

Dices: "...Para nosotros tanto Dios como el diablo son simplemente invenciones de los religiosos, con el fin de provocar temor y así controlar a los creyentes haciéndoles creer que el primero es la regla y el segundo la antítesis de esta regla..."

Bueno, me parece que aquí olvidaste lo que antes dijiste al pastor Sugel, lo citaré otra vez:

"El quid del asunto mi hermano es que los ateos no somos lo que ustedes creen que somos (el diablo)" ¿Es una invención o no?, Digo esto porque al usar a ese ser real mostrado en las Escrituras, pareciera que de alguna manera reconoces su existencia, y eso trae una serie de consecuencias logicas.

Gracias por citar ese versículo, llama la atención que lo hagas, imagino que, como una máxima más. Para mi estas palabras son Vivas y Eficaces, esas palabras me libraron de la esclavitud en la cual estaba. Estando ciego, Dios usó Su Palabra para abrir mis ojos, estando muerto, con esa Palabra Dios me dió vida, con esas Palabra escuché la Voz del Pastpr Eterno, esas palabras fueron usadas por Dios, para romper las cadenas que me tenían cautivo, y hoy Porfirio soy el hombre más gozozo por ser parte de la Familia de Dios por purísima gracia. “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” (Juan 8:32)

Atte Fares Palacios